¿Vale la pena apostar porque solamente una inmobiliaria realice la comercialización de tu inmueble?
En el competitivo mundo de los bienes raíces, la exclusividad en la comercialización de inmuebles se ha convertido en una opción cada vez más popular tanto para propietarios como para inmobiliarias. Pero ¿realmente vale la pena?
Contratar a una inmobiliaria para que sea la única responsable de la promoción, publicidad y venta de la propiedad, implica que solamente ella tiene el derecho de venderla por un determinado tiempo.
Una de las principales ventajas es la reducción de la competencia, al eliminar la posibilidad de que se pierda la comisión porque alguien más lleve a cabo la venta del inmueble. Esto también significa que se puede dedicar más tiempo y recursos a promocionar la propiedad de manera efectiva y encontrar al cliente potencial.
Otro beneficio es que puede aumentar la confianza del prospecto comprador, al tratar con un agente que conoce bien la propiedad, ofreciendo información precisa y detallada sobre ella. Dando por consecuencia que se sienta más cómodo para tomar la decisión de compra.
Además, puede resultar en una venta más rápida y eficiente, ya que el propietario tiene un mayor control y la inmobiliaria puede establecer una estrategia de marketing más sólida y enfocada, que atraiga a más compradores y permita cerrar la venta en un plazo más corto.
Sin embargo, hay algunos inconvenientes que deben tenerse en cuenta. En primer lugar, la exclusividad puede limitar el alcance de la promoción de la propiedad al elegir una inmobiliaria que no comparta comisión por la venta con otros agentes inmobiliarios. Esto haría que no difunda la información y por lo tanto no llegue a su cartera de clientes.
También puede limitar la capacidad de negociación del propietario al no tener acceso a todas las ofertas disponibles en el mercado.
Cabe señalar que el inmueble puede no ser promocionado de manera efectiva en todos los canales de marketing disponibles, cuando existe la posibilidad de no recuperar la inversión hecha en su promoción, reduciendo el número de prospectos.
En resumen, al trabajar con una inmobiliaria puede traer numerosas ventajas, solamente si se escoge a una de confianza, con atención personalizada y que trabaje con otros agentes, como Ibashó, logrando maximizar las oportunidades de venta. Es por esta razón, que los propietarios deben elegir cuidadosamente quien haga la comercialización de su inmueble, independientemente de la estrategia elegida.